Una tendencia es la dirección general de un mercado o del precio de un activo. En el análisis técnico, las tendencias se identifican por las líneas de tendencia o la acción del precio, que destacan cuando el precio está haciendo máximos y mínimos más altos para una tendencia alcista, o mínimos y máximos más bajos para una tendencia bajista.
Muchos operadores optan por operar en la misma dirección que la tendencia, mientras que los contrarios tratan de identificar los retrocesos o de operar en contra de la tendencia. Las tendencias alcistas y bajistas se dan en todos los mercados, como las acciones, los bonos y los futuros. Las tendencias también se dan en los datos, como cuando los datos económicos mensuales suben o bajan de un mes a otro.
Conceptos Clave
Una tendencia es la dirección general del precio de un mercado, activo o métrica.
Las tendencias alcistas están marcadas por puntos de datos ascendentes, como máximos y mínimos oscilantes más altos.
Las tendencias bajistas están marcadas por puntos de datos descendentes, como mínimos y máximos oscilantes más bajos.
Muchos operadores optan por operar en la misma dirección que la tendencia, intentando beneficiarse de la continuación de esa tendencia.
La acción del precio, las líneas de tendencia y los indicadores técnicos son herramientas que pueden ayudar a identificar la tendencia y advertir cuando se invierte.
Cómo funcionan las tendencias
Los operadores pueden identificar una tendencia utilizando diversas formas de análisis técnico, como las líneas de tendencia, la acción del precio y los indicadores técnicos. Por ejemplo, las líneas de tendencia pueden mostrar la dirección de una tendencia, mientras que el índice de fuerza relativa (RSI) está diseñado para mostrar la fuerza de una tendencia en un momento dado.
Una tendencia alcista está marcada por un aumento general del precio. Nada se mueve directamente hacia arriba durante mucho tiempo, por lo que siempre habrá oscilaciones, pero la dirección general tiene que ser más alta para que se considere una tendencia alcista. Los mínimos de las oscilaciones recientes deben estar por encima de los mínimos de las oscilaciones anteriores, y lo mismo ocurre con los máximos de las oscilaciones. Una vez que esta estructura comience a romperse, la tendencia alcista podría estar perdiendo fuerza o convirtiéndose en una tendencia bajista. Las tendencias bajistas se componen de mínimos y máximos más bajos.
Mientras la tendencia sea alcista, los operadores pueden suponer que continuará hasta que haya pruebas que indiquen lo contrario. Dichas pruebas podrían incluir mínimos o máximos de oscilación más bajos, la ruptura del precio por debajo de una línea de tendencia o que los indicadores técnicos se vuelvan bajistas. Cuando la tendencia es alcista, los operadores se centran en comprar, intentando beneficiarse de una subida continuada del precio.
Cuando la tendencia es bajista, los operadores se centran más en vender o ponerse en corto, intentando minimizar las pérdidas o beneficiarse de la caída de los precios. La mayoría de las tendencias bajistas (no todas) se invierten en algún momento, por lo que, a medida que el precio sigue bajando, más operadores empiezan a ver el precio como una ganga y entran a comprar. Esto podría llevar a la aparición de una tendencia alcista de nuevo.
Las tendencias también pueden ser utilizadas por los inversores que se centran en el análisis fundamental. Esta forma de análisis examina los cambios en los ingresos, las ganancias u otros parámetros empresariales o económicos. Por ejemplo, los analistas fundamentales pueden buscar tendencias en los beneficios por acción y en el crecimiento de los ingresos. Si los beneficios han crecido durante los últimos cuatro trimestres, esto representa una tendencia positiva. Sin embargo, si los beneficios han disminuido durante los últimos cuatro trimestres, esto representa una tendencia negativa.
La ausencia de una tendencia -es decir, un periodo de tiempo en el que hay poco progreso general hacia arriba o hacia abajo- se denomina rango o periodo sin tendencia.
Uso de las líneas de tendencia
Una forma habitual de identificar las tendencias es utilizar las líneas de tendencia, que conectan una serie de máximos (tendencia bajista) o mínimos (tendencia alcista). Las tendencias alcistas conectan una serie de mínimos más altos, creando un nivel de soporte para futuros movimientos de precios. Las tendencias bajistas conectan una serie de máximos más bajos, creando un nivel de resistencia para futuros movimientos de precios. Además del soporte y la resistencia, estas líneas de tendencia muestran la dirección general de la tendencia.
Aunque las líneas de tendencia hacen un buen trabajo mostrando la dirección general, a menudo necesitarán ser redibujadas. Por ejemplo, durante una tendencia alcista, el precio puede caer por debajo de la línea de tendencia, pero esto no significa necesariamente que la tendencia haya terminado. El precio puede moverse por debajo de la línea de tendencia y luego seguir subiendo. En tal caso, la línea de tendencia puede necesitar ser trazada de nuevo para reflejar la nueva acción del precio.
Las líneas de tendencia no deben utilizarse exclusivamente para determinar la tendencia. La mayoría de los profesionales también tienden a mirar la acción del precio y otros indicadores técnicos para ayudar a determinar si una tendencia está terminando o no. En el ejemplo anterior, una caída por debajo de la línea de tendencia no es necesariamente una señal de venta, pero si el precio también cae por debajo de un mínimo de oscilación anterior y/o los indicadores técnicos se vuelven bajistas, entonces podría serlo.
Ejemplo de tendencia y línea de tendencia
El siguiente gráfico muestra una línea de tendencia ascendente junto con una lectura del RSI que sugiere una fuerte tendencia. Aunque el precio está oscilando, el progreso general es al alza.
La tendencia alcista comienza a perder impulso y la presión de las ventas se hace sentir. El RSI cae por debajo de 70, seguido de una gran vela bajista que lleva al precio hasta la línea de tendencia. El movimiento a la baja se confirmó al día siguiente, cuando el precio se situó por debajo de la línea de tendencia. Estas señales podrían haberse utilizado para salir de las posiciones largas, ya que había pruebas de que la tendencia estaba cambiando. También se podrían haber iniciado operaciones cortas.
A medida que el precio se mueve hacia abajo, comienza a atraer a los compradores interesados en el precio más bajo. Otra línea de tendencia (no mostrada) también podría dibujarse a lo largo de la caída del precio para indicar cuándo puede producirse un rebote. Esa línea de tendencia habría sido penetrada cerca de la mitad de febrero cuando el precio hizo un rápido fondo en V y progresó hacia arriba.
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